Efectos de la dieta en la violencia
Si no hace mucho comentaba el hecho de que una dieta puede volverte majareta no deja por ello de ser menos interesante las últimas entradas que estoy leyendo al respecto.
Una de ellas es Diet and Violence que comenta varios estudios en población reclusa y como la dieta puede incidir en la reducción de la violencia.
En el primer estudio, de Bernard Gesch y publicado en el 2002 “Influence of suplementary vitamins, minerals, and essential fatty acids on the antisocial behavior of young adult prisioners.” se estudiaron a 231 “jóvenes, hombres, adultos, prisioneros” voluntarios.
Unos tomaron un placebo mientras otros un suplemento con vitaminas, minerales y ácidos grasos esenciales durante 142 días de media. Se separaron en un grupo de control y otro con el suplemento en buena parte de forma aleatoria y se tomaron medidas antes, durante y después de varios comportamientos y de los reportes relacionados a su actitud.
Dicho suplemento contenía 1260mg de ácido linoleico, 160mg de ácido linoleico gamma, 80mg EPA y 44mg DHA mientras que el placebo era una pastilla de aceite de oliva. Los resultados fueron destacables: el número de medio de “incidentes disciplinarios por cada 1000 personas-días” bajó de 16 a 10.4 en el grupo activo es decir un 37% mientras que en el grupo placebo sólo fue un 6.7%.
Parece ser que buena parte de las mejoras fueron al subsanar deficiencias de ácidos omega-3, magnesio y zinc. Actualmente Gesch está estudiando a 1000 prisioneros en 3 prisiones distintas de Reino Unido para intentar contestar preguntas que el anterior estudio no pudo.
Si tenéis ganas de más información, echadle una ojeada al texto de Diet and Violence que ya os mencioné antes ya que lo desarrolla un poco más.